Proyecto: Remodelación de convento en Lituania

ACN.- Hace cinco años se asentaron unas religiosas de la Divina Providencia en Utena, un centro del noreste de Lituania que dispone de industria, varias escuelas y universidades. Allí viven muchos jóvenes, y hay dos parroquias católicas que ofrecen varias actividades para ellos.

No obstante, las religiosas han comprobado que muchos jóvenes creen que Dios es alguien que, ante todo, castiga y lo controla todo, por lo que no han conocido a Dios como Padre que los quiere, perdona y acepta, y que les infunde esperanza. Además, la experiencia de las Hermanas es que los creyentes han oído hablar del Evangelio con ocasión del bautizo, la primera comunión, las bodas o los funerales, pero que lo que muchos buscan es respuesta a preguntas como estas: “¿Acaso no son todas las religiones lo mismo? ¿Puede una persona moderna y formada ser profunda y sinceramente católica? ¿Se puede conciliar la fe católica con los avances de la ciencia y la vida moderna?” A menudo, las Hermanas también escuchan declaraciones como esta: “Creo que Jesús fue un hombre sabio y bueno, pero no creo que sea Dios”.

 

Ante esta situación, las religiosas decidieron acudir durante seis meses a las escuelas para ayudar a los jóvenes a encontrar respuestas a sus preguntas. El programa tuvo tan buena acogida que las Hermanas vieron en la enorme demanda un signo de Dios, por lo que decidieron abrir en su convento un centro de evangelización. Esto está en consonancia con lo que enseñaba su fundadora, Marija Rusteikaitė: “El espíritu de Dios nos anima a convertirnos en herramientas del amor redentor de Dios, sobre todo, al ayudar a las personas a encontrarse con Dios en su propia trayectoria vital”. Por este motivo, las religiosas acuden a las ciudades.

En un centro de evangelización, los jóvenes y jóvenes adultos tendrían la oportunidad de permanecer ahí durante varios días para participar en jornadas de retiro y otros actos. El proyecto prevé que el centro ofrezca espacio para veinte invitados. Allí tendrán lugar ejercicios espirituales, actos sobre la Teología del Cuerpo de San Juan Pablo II, encuentros de fin de semana para la promoción de las vocaciones, asesoramiento individual, acompañamiento de jóvenes y adultos, y programas para mujeres traumatizadas tras un aborto. Además, en la capilla estará expuesto durante todo el día el Santísimo Sacramento, que será adorado por turnos por las religiosas, los invitados y otras personas.

Pero para poder hacer realidad este proyecto, es preciso realizar algunas obras de remodelación del edificio, y Ayuda a la Iglesia Necesitada apoyará con 15.000 euros.

Referencia: 436-05-19

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