

ACN.- El Gobierno turco promovió una campaña oficial contra las celebraciones de Navidad a través de manifestaciones, imágenes en las redes sociales y carteles en las fachadas. Una iniciativa envuelta en la polémica y considerada por muchos como el detonante del ataque terrorista en el club Reina de Estambul.
“Somos musulmanes. No al Año Nuevo y a las celebraciones de Navidad”. Esto es lo que se podía leer en numerosos carteles colocados por la ciudad días antes del atentado terrorista en la conocida discoteca a orillas del Bósforo -reivindicado por el autodenominado Estado Islámico-, en el que fueron asesinadas 39 personas que celebraban la llegada del nuevo año.
Las autoridades turcas promovieron durante el mes de diciembre una campaña oficial contra las celebraciones de Navidad. Una iniciativa impulsada principalmente por Mehmet Görmez -cercano al presidente Recep Tayyip Erdogan y miembro de la Dirección de Asuntos Religiosos-, quien apenas un día antes del ataque defendió que “el Año Nuevo es ilegítimo y no es parte de la tradición turca”.
Carteles en las fachadas atacando la figura de Papá Noel, manifestaciones en las que se pedía “respetar 1.000 años de la religión del Islam y no celebrar ningún tipo de actividad religiosa de Navidad”, imágenes circulando por las redes sociales y hombres repartiendo folletos en contra de la Navidad. Así fue como el Gobierno turco puso en marcha su particular campaña en contra de las celebraciones cristianas. Con información de Amigos de Irak