En Beirut se vive una escena de guerra: hay destrucción y desolación en todas sus calles

ACN.-Beirut es una ciudad devastada, luego de que explotaran toneladas de nitrato de amonio almacenadas en el área portuaria de la capital libanesa. Hasta el momento, al menos 100 personas murieron y más de 4 mil resultaron heridas.  El Patriarca maronita Cardenal Bechara Boutros Rai, presidente de la Conferencia de Patriarcas y obispos católicos del Líbano, en un llamamiento a los países del mundo solicitando ayuda de emergencia dijo: «Beirut, la prometida de Oriente y el faro de Occidente, está herida. Es una escena de guerra: hay destrucción y desolación en todas sus calles, sus distritos y sus casas».

Desde Beirut, el P. Raymond Abdo, aseguró a ACN que la explosión se sintió como una bomba atómica, que produjo humo rojo en todas partes y ocasionó un daño enorme. El sacerdote describió cómo, en un convento no lejos de su monasterio, una hermana religiosa enferma y anciana murió a causa de sus heridas en la explosión. «ella era la única que no estaba en el comedor del convento en el momento de la explosión y, si los demás hubieran estado en sus habitaciones, muchos habrían muerto o herido de gravedad.

En tanto en ACN Líbano, el padre Samer Nassif, informó que la zona cristiana de Beirut está completamente devastada y que los medios de vida se encuentran totalmente destruidos por la explosión: “en un segundo, se causó más daño al barrio cristiano de Beirut que durante los largos años de la guerra civil. Tendremos que construirlo de nuevo desde cero».

Los padres Abdo y Nassif señalaron que, después de la larga crisis económica y el coronavirus, el Líbano está mal equipado para enfrentar la emergencia y necesita urgentemente ayuda internacional para las necesidades básicas de las personas.

ACN dirigirá un paquete de alimentos de emergencia que será llevado a Beirut y que será destinado a las familias pobres más afectadas por la explosión, en especial a las que se encuentran refugiadas, además  ACN hace un llamamiento a la oración y solidaridad por las víctimas y sus familias.

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