ACN.- La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada presentó su informe anual 2020 el 18 de junio. “La pandemia ha agravado drásticamente las necesidades de aquellos cristianos que, en muchas regiones y de la noche a la mañana, se han quedado literalmente sin pan y sin salario. Además, los sacerdotes y religiosos no saben cómo llegar a fin de mes”, explicó el presidente ejecutivo de ACN, Thomas Heine-Geldern.
A pesar de la crítica situación, los benefactores han seguido siendo fieles a la fundación pontificia. Esta generosidad nos llena de gratitud, pues no era previsible, sobre todo porque la crisis también ha traído muchas incertidumbres y dificultades económicas a nuestros benefactores. Nos alegra especialmente que el número de nuestros benefactores en todo el mundo haya aumentado.
En el ejercicio 2020, la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) reunió donativos por valor de 122,7 millones de euros para los cristianos necesitados y oprimidos a través de sus 23 oficinas nacionales, aumentando en un 15.4% su apoyo a los países necesitados con un total de 4.758 proyectos financiados en 138 países. ACN se financia íntegramente con donativos y no percibe ingresos derivados de impuestos ni de otros fondos públicos.
Tras el estallido de la pandemia, la fundación pontificia financió 401 proyectos de ayuda relacionados con la pandemia por un importe de más de 6,2 millones de euros para paliar las mayores necesidades.
La pandemia cambia las prioridades regionales
En 2020, alrededor de un tercio (32,6%) de la ayuda total a proyectos de ACN se destinó a África. ACN se preocupa especialmente los países de la región del Sahel, debido al terror que la sacude y que la pandemia ha agravado la situación de las personas que se han visto obligadas a huir.
Mientras que Medio Oriente – en particular Siria e Iraq- ocupó el primer lugar en la financiación de ACN durante muchos años. Esta región sigue siendo muy importante para ACN.
Tras la explosión en el puerto de la capital libanesa de Beirut, el 4 de agosto de 2020, la fundación pontificia lanzó un programa de ayuda de emergencia para el país que alberga a la mayor comunidad cristiana de Oriente Próximo. Así, por ejemplo, se distribuyeron alimentos inmediatamente después de la explosión.
En 2020, otra prioridad fue Asia (18% de los fondos destinados a proyectos). Allí, la mayor parte de las ayudas se destinó a la India. Este continente se ha visto especialmente afectado por la pandemia, y en ocasiones, la minoría cristiana se ha visto privada de asistencia pública. En Pakistán, por ejemplo, ACN apoyó la distribución de ayuda entre los cristianos que habían perdido sus medios de sustento como consecuencia de la pandemia.
En Latinoamérica, se destinó un apoyo del 14.8% del total de los ingresos para proyectos de ayuda a la Iglesia necesitada y perseguida.
Especialmente durante la crisis del coronavirus, los estipendios de misa son un signo de unidad en la oración y para muchos sacerdotes la única fuente de ingresos. En 2020, se apoyó a los sacerdotes con más de 1,7 millones de estipendios de misa. De esta forma, uno de cada nueve sacerdotes del mundo recibió esta forma de apoyo directo y espiritual. Además de la formación de 14,000 futuros sacerdotes.
En muchas regiones del mundo la crisis del coronavirus ha sellado la fuente de ingresos de las religiosas, con ayuda para su sustento básico, la formación y el mantenimiento de sus apostolados, ACN apoyó a más de 18.000 religiosas durante el 2020.
Una partida importante para ACN fue y sigue siendo la ayuda al transporte, para que los sacerdotes y catequistas puedan llegar a los fieles incluso en terrenos accidentados: en 2020, ACN financió 783 bicicletas, 280 coches, 166 motocicletas, once barcos, dos autocares y un camión.
La pandemia y sus consecuencias seguirán ocupándonos en el futuro. También la grave situación en el continente africano, donde el terrorismo y la violencia se propagan cada vez más, es motivo de gran preocupación para ACN. Tan importante como aliviar la necesidad material es otorgar voz y rostro a los cristianos oprimidos y perseguidos, esto lo hacemos en ACN mediante la información, la oración y la caridad activa. Desde ACN expresamos nuestro agradecimiento por poder contar con nuestros benefactores y simpatizantes de todo el mundo.