A un mes del 19s. se registran daños en 996 Iglesias

ACN.- Los sismos de septiembre no solo destrozaron casas, sino también numerosos templos reliogiosos. Hasta el momento, con información del Observatorio de la Conferencia del Episcopado Mexicanos (CEM), se registran daños en 996 Iglesias en distinto grado.

Cúpulas y techo caídos, paredes a punto de colapsar y grietas enormes son sólo algunas de las afectaciones de las Iglesias. Las diócesis más dañadas son la de Antequera Oaxaca con 83, Tehuantepec con 87, Tlaxcala con 133, Cuernavaca con 89, la Arquidiócesis de Puebla con la impresionante cifra de 232 y la de México con 107. A estas se agregan las diócesis de Ecatepec, Guerrero, Nezahualcóyotl, San Cristóbal de las Casas, la Prelatura de Mixes, Tuxtla Gutiérrez, Texcoco, Toluca, Tehuantepec, Chilpancingo-Chilapa, Tapachula, Tenancingo, Valle de Chalco y Coatzacoalcos.

El daño no sólo es material, también espiritual, ya que las comunidades ven en sus templo un rasgo de su identidad. Es por ello que los habitantes acudieron a las iglesias para comenzar con las tareas de limpieza, no obstante, los obispos y párrocos a cargo de éstas indicaron que, por ser edificaciones históricas, artísticas y patrimoniales en su mayoría, era necesaria la intervención del gobierno para hacer una evaluación del daño de cada iglesia, y no se puede tocar ni levantar nada.

Además, es y será necesaria la intervención de instituciones como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y de la Dirección General de Sitio y Monumentos Históricos, las cuales tienen a su cargo el resguardo y, en este caso, la reconstrucción de los templos, que algunos datan del siglo XVI, XVII y XVIII.

“He hablado con las autoridades eclesiásticas de las entidades con iglesias dañadas para que no den acceso a los fieles, en tanto no vuelvan a estar en condiciones” señaló María Cristina García Cepeda, titular de la Secretaría de Cultura Federal a pocos días del terremoto del 19 de septiembre.

La secretaría señaló que el trabajo de reconstrucción será “titánico” y que, en algunos casos, llevará semanas, pero en otros, el proceso podrías durar varios meses porque “no estamos hablando de la reparación de casas, hospitales u otras construcciones, sino de la reconstrucción profesional del valioso patrimonio artístico, arqueológico e histórico del país”

En este sentido, la dependencia dispone del seguro del INAH para edificaciones patrimoniales, así como de la participación para la reconstrucción del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden), de apoyos internacionales estimados para emergencia por el Centro de Patrimonio Mundial de la UNESCO, la participación de las comunidades afectadas, entre otros apoyos.

El trabajo de las instituciones avanza paulatinamente. Las brigadas de especialistas empezaron su recorrido a días de lo acontecido y continúan con estos en los estados más afectados. Es importante señalar que solicitan esperar hasta que dichas brigadas lleguen para levantar los escombros, y así trabajar junto a la comunidad para dar inicio a las labores de limpieza

“Se recomienda a la población en general cooperar con las acciones emergentes y preventivas, como es el retiro cuidados de los escombros, el aseguramiento de los inmuebles, la protección de las cubiertas colapsadas, mediante el uso de lonas o materiales impermeables, los apuntalamientos y la colocación de andamio para acceder a las techumbres y a las torres campanarios de las iglesias, que en numerosos casos han sufrido fisuras, así como desplomes parciales” escribe el INAH en su portal web. (Con información de Cáritas).

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