ACN.- “Más de cientos de miles de personas viven con miedo y con incertidumbres y no tienen cómo, ni la capacidad para abandonar la ciudad”, declara a la radio Easter His Exc., Monseñor Erkolano Lodu Tombe, obispo de Yei, ciudad ecuatorial de Sudán del Sur que ha sido golpeado por una ola de masacres y asesinatos que se le han atribuido a grupos armados formado por civiles y militares que apoyan al vice presidente Riek Machar.
“Por el momento no se han presentado disparos en Yei, pero la población vive en constante miedo de que aparezca una nueva ola de violencia y de asesinatos”, dice Monseñor Lodu. El Obispo añade que la población de los al rededores no puede viajar a Yei, a excepción de aquellos que llegan en avión de otros países. Los campesinos no pueden ir y tomar sus cosechas y la población tendrá que continuar con asistencia humanitaria de alimentación durante todo el 2017.
La guerra civil entre los que apoyan al Presidente Salva Kiir y al vice presidente Riek Machar han tomado una dimensión étnica, opuesta a las tribus Dinkas y Nuer. Otros grupos étnico y tribus se han aliado a uno de los dos contrincantes, esperando tener ventaja en sus conflictos locales. El cónsul estadounidense representante de de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Génova, ha denunciado que el Gobierno de Sudán del Sur está preparando una larga escala de ataques en contra de la población en la región centro ecuatorial.