ACN.- En octubre de 2018, Gerard Anjiangwe, un seminarista de la arquidiócesis de Bamenda, fue asesinado frente a la iglesia parroquial de Bamessing en el municipio de Ndop, Camerún.
Alrededor de las 9:30 de la mañana, al final de la santa misa, los fieles fueron saliendo, pero Gerard Anjiangwe y algunos lectores se quedaron en la Misión preparándose para la liturgia del día siguiente. Unos militares se bajaron de la camioneta y comenzaron a disparar. Algunos de los monaguillos que iban a sus casas regresaron a la iglesia, mientras que otros se escondieron en los arbustos cercanos. Gerard, se postró en el suelo rezando el rosario.
Los militares intentaron abrir la puerta de la iglesia, pero no tuvieron éxito. Se acercaron a Gerard que yacía postrado en el suelo, rezando y le pidieron que se pusiera de pie. Después de interrogarlo, le pidieron que se acostara de nuevo. Luego, recibió tres disparos en el cuello y murió al instante. Gerard era el único hijo de la familia, su padre es catequista. Fue muy duro para ellos.
El seminarista Gerard, fue un joven con mucha alegría y fe que consideraba que la Iglesia motiva a que en el mundo reine la paz con las palabras del Evangelio, pero estaba consciente de que no puede haber paz sin justicia.
Oremos: Por todos los seminaristas que viven en situaciones de conflicto y guerra civil, especialmente por los de Camerún.