Con la “Ceremonia de los Olivos“ se dio inicio a la reconstrucción en la Llanura del Nínive

ACN.- Tan frágil como un joven árbol de olivo, tan imperceptible como la semilla de mostaza del Evangelio– así comienza la reconstrucción de las primeras 105 casas de familias cristianas en las aldeas de Bartella, Karamless y Qaraqosh, en la llanura del Nínive. El trabajo de las primeras construcciones que se realizarán en Qaraqosh comenzarán este jueves (11 de mayo).

La fuente de esta nueva esperanza son las iglesias ubicadas en las aldeas que fueron saqueadas y destruidas por el autodenominado Estado Islámico. Los ataques perpetrados por ISIS en las llanuras de Nínive, en agosto de 2014, obligaron a unos 130.000 cristianos a abandonar sus hogares y refugiarse en Kurdistán. Ayer por la mañana, Philipp Ozores, Secretario General de la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), entregó olivos a 35 familias ortodoxas sirias en la pequeña iglesia de Mor Shmuni en Bartella.

La reconstrucción de sus casas, que comenzará a lo largo de los próximos días, fue organizada por el Comité de Reconstrucción de Nínive (NRC). El comité está compuesto por representantes de las iglesias Ortodoxa Siria, Católica y la Católica Caldea, así como tres consultores designados por la Ayuda a la Iglesia Necesitada, quienes tienen el trabajo de planificar la reconstrucción de casi 13.000 casas cristianas destruidas por ISIS en lel Nínive.

En Bartella, 1.451 casas pertenecientes a familias ortodoxas sirias tienen que ser reconstruidas. Setenta y cinco de estos fueron destruidos por completo, 278 quemados y 1.098 parcialmente dañados. Los servicios de agua y electricidad se han podido restaurar sólo unos días atrás.

En su discurso durante la ceremonia de presentación de los olivos, el Arzobispo Timothaeus Mosa Alshamany, de la Iglesia Siria Ortodoxa de Antioquía, que también es prior del Monasterio de San Mateo, no escondió las dificultades que implica este proyecto. “Hace unos meses, estábamos esperando la liberación de nuestras ciudades. Hoy, estamos esperando la reconstrucción. Volver a nuestras ciudades es aún más difícil que huir de ellas. “

Después de la ceremonia en Bartella, el pequeño “convoy de la esperanza” continuó a Karemless. Allí Philipp Ozores, el padre Andrzej Halemba, jefe de la sección de Oriente Medio de Ayuda a la Iglesia Necesitada y Presidente interino de la Comisión, así como el padre Salar Kajo, responsable de los esfuerzos de reconstrucción en las aldeas caldeas de Tel Skuf , Bakofa, Badnaya, Tel Keppe y Karemless, le entregaron olivos a 20 familias. La ceremonia tuvo lugar en la iglesia caldea de Mar Addaii, que también fue quemada parcialmente por ISIS.

Después de la ceremonia, Habib Yuossif Mansuor, de 76 años, recordó el sufrimiento que vivió al tener que abandonar su propio pueblo: “Miramos el dolor los ojos. Huímos después de la medianoche, dejando nuestras casas y todas nuestras posesiones. Yo tenía una casa de dos pisos aquí en Karemless que fue bombardeada y hoy está en el suelo. Todos hablamos el mismo idioma, por lo que nos gustaría volver a nuestras ciudades en las llanuras de Nínive como hermanos, como si tuviéramos un solo corazón. Queremos vivir y trabajar juntos, como si fuéramos un solo cuerpo. Agradecemos al Señor ya la Ayuda a la Iglesia Necesitada “.

En Karemless, 754 casas necesitan ser reparadas. De éstos, 89 fueron completamente destruidas, 241 fueron quemados y 424 fueron parcialmente dañadas. El suministro de agua está funcionando nuevamente desde ayer: un pequeño pero importante signo de esperanza.

La última de las “Ceremonias de los olivos” tuvo lugar en Qaraqosh. Aquí, 6,327 casas que pertenecen a los cristianos católicos sirios necesitan ser reparadas. De éstas, 108 casas fueron completamente destruidas. Estas son, además de las 400 casas pertenecientes a los cristianos ortodoxos sirios (de estos, sólo 7 casas fueron completamente destruidas). Sin embargo, no hay falta de entusiasmo o habilidades: 40 ingenieros han “firmado” para reconstruir la ciudad y cerca de 2.000 trabajadores están listos para comenzar a trabajar. La electricidad se está devolviendo lentamente a la ciudad entera.

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