ACN.- A continuación reproducimos un comunicado de la Conferencia Episcopal en Nicaragua con respecto a los últimos acontecimientos:
“…les echarán mano y les perseguirán, les entregarán a las autoridades de las sinagogas y les meterán en la cárcel; los conducirán ante reyes y gobernadores por mi nombre. Esto les sucederá para que den testimonio, pero no se propongan preparar su defensa porque yo les comunicaré una elocuencia y una sabiduría a la que no podrán resistir y contradecir todos sus adversarios… Con su perseverancia salvarán sus vidas.” (Lc 21, 12-15, 19). Los Obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua motivados por estas palabras que nos presenta el evangelio del Domingo XXXIII del Tiempo Ordinario, así como por las arbitrariedades cometidas por las autoridades nacionales: 1. Nos solidarizamos con Su Eminencia Reverendísima Cardenal Leopoldo José Brenes y hace suya su preocupación de padre ante el asedio que sufre su hijo el Reverendo Padre Edwin Román junto a los demás feligreses con los que se encuentra al interior de la parroquia San Miguel en Masaya. Estas son personas con derechos, especialmente el derecho por excelencia que es la vida.
2. Expresa su profunda preocupación por las agresiones físicas contra algunos consagrados, el acoso, asedio e irrespeto contra la Catedral Metropolitana y otros templos parroquiales de la Arquidiócesis de Managua y por la indiferencia del Estado ante los derechos de los nicaragüenses que manifiestan su dolor y sus necesidades comprometiendo sus vidas. Este modo de protesta que se lleva a cabo en la parroquia San Miguel de Masaya, es un grito de impotencia, de inseguridad, de tristeza, de indignación, es el resultado de muchos meses de sufrimiento.
3. Exhortamos a los responsables de estos asedios para que depongan su postura. Es demasiado el dolor que han sufrido los nicaragüenses. Las familias que se encuentran asediadas cargan con un doble sufrimiento: la falta de libertad de sus familiares encarcelados y, ahora, el estado de sitio que atenta contra sus vidas. Pedimos al Gobierno escuche sus peticiones, que a la vez son sus derechos.
4. A todos los fieles católicos les pedimos que se unan a nosotros con esta oración: Señor Jesús enséñanos a ser como Tú, Danos la fortaleza de tu Santo Espíritu para contrarrestar el odio con el amor que sube a la cruz. Regálanos entrañas de misericordia y un corazón justo para discernir tus designios en medio de la crisis. Regálanos la conciencia de nación. Amén.
María, Madre que ha sufrido en carne propia la persecución, nos conceda su intercesión para ser Iglesia testigo, fiel al mensaje del Evangelio: Jesucristo, Nuestro Divino Salvador.
En Managua a los 19 días del mes de noviembre del año del Señor de 2019.