ACN.- Magdalene tiene una hija de tres años y es feliz con su esposo. Ella está emocionada, vivirá un verano diferente. “Va a ser la primera vez que salgamos de la ciudad después de cuatro años de guerra”.
Magdalene junto con otras familias irán de campamento a Kafroun y conocerán el Wadi Al-Nasara (Valle de los Cristianos).
“Tengo ganas de ir a conocer ese lugar, es conocido por ser una de las regiones más bonitas de Siria, una zona fértil, cerca de la frontera con Líbano, de mayoría cristiana. Además me gusta que en esos días profundizaremos en la oración y en la fe y haremos nuevos amigos”.
Entusiasmada comenta que el campamento será posible gracias a la convocatoria de la iglesia de su comunidad y a la generosidad de cientos de personas en el mundo que donan a través de la Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada, “…su apoyo nos hace sentir que no estamos solos.”
Al campamento donde acudirá Magdalene no solo irán sirio-católicos, también ortodoxos y grecomelquitas, los cuales tendrán diversas actividades recreativas y espirituales. Además recibirán alimentos, alojamiento, alquiler de las instalaciones y transporte.
“Ninguna familia podría hacerse cargo del costo de esos días de descanso durante el verano. Salir nos animará mucho, hará que renovemos la esperanza”, dice Magdalene.