Historias de Cuaresma 32: El dolor en primera línea de la batalla

ACN.- Historias Cuaresma 32:  Natalya es madre de una niña de tres años. Su marido lleva 18 meses en el ejército en Ucrania. Ella es una de las personas que recibe apoyo de la Iglesia en la compañía de la Casa de la Misericordia, fundada por el Arquidiócesis de Lviv: “Aquí no me siento sola y puedo hablar de mis miedos. Ser esposa de un soldado es estar en primera línea de la batalla,  significa mucho sufrimiento. Lo único que quieres es que tu marido sobreviva».

Natalya asegura que estar tener ayuda de la Iglesia es tener estabilidad para ella y su hija. «Me están ayudando a protegerme contra la locura y, como resultado, me siento más fuerte. Había estado deambulando como un espíritu perdido”.

Monseñor Volodymyr Hrutsa, obispo auxiliar greco-católico de Lviv, describe la importante
papel desempeñado por la Casa de la Misericordia: “No son sólo aquellos que sufren un trauma son los que reciben ayuda aquí, sino toda la familia. En muchos casos la crisis es tan grave que afecta a todos los miembros de la familia. La gente tiene muchas preguntas en tiempos de guerra, y algunas de ellas son muy difíciles». El cristianismo es la única institución que tiene respuestas al sufrimiento. A veces la fe es el único credo capaz».

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