ACN.- En medio de la devastación causada por la guerra, la Parroquia de San Juan Pablo II, ubicada en las afueras de Leópolis, ha sido un faro de esperanza y solidaridad para cientos de desplazados. Desde el inicio del conflicto, esta comunidad ha desempeñado una labor increíble al ofrecer refugio y apoyo a quienes más lo necesitan.
Durante los momentos más difíciles, la parroquia se convirtió en un punto de partida crucial para aquellos que buscaban un camino seguro hacia Polonia. Hasta 250 personas desplazadas encontraron alivio y protección aquí, recibiendo hasta 1.800 comidas diarias preparadas con amor en una cocina improvisada en una tienda de campaña.
Hoy en día, aunque la situación ha mejorado, aún quedan 50 personas desplazadas en la parroquia. Principalmente son familias con niños pequeños y ancianos que enfrentan dificultades para encontrar alojamiento estable. Hablamos con algunos de ellos, como Nina de Donetsk, Lyudmila de Járkov, Polina de Mariupol e Iryna de Zaporiyia, personas cuyas historias resuenan dolorosamente en nuestros corazones a través de los titulares de noticias.
Estas valientes mujeres fueron evacuadas en tren por voluntarios en marzo de 2023 y encontraron un refugio seguro en Leópolis. A pesar de haber perdido todo, no tienen familiares que puedan cuidar de ellas, pero están profundamente agradecidas a la parroquia por brindarles un lugar donde sentirse seguras y apoyadas. Sin embargo, sus preocupaciones persisten: «¿Qué pasará si se agotan las ayudas? ¿A dónde iremos entonces?» se pregunta Nina, reflejando la incertidumbre que aún enfrentan.
La misión de ACN es continuar brindando apoyo y esperanza a aquellos que han sido afectados por la guerra. Con tu generosidad y solidaridad, podemos asegurarnos de que nadie se sienta solo en tiempos de necesidad. Únete a nosotros en este noble propósito y hagamos una diferencia juntos.
