Luego del 19s Clarisas en Cuernavaca reconstruyen su casa. ACN apoya

ACN.- Las 50 Misioneras Clarisas del Santísimo Sacramento son un potente motor de la misión en la Diócesis de Cuernavaca, en México. Durante años recargaron fuerzas para su misión protegidas por los muros de su casa.

Estas religiosas ayudan en escuelas y hospitales; imparten el Catecismo a niños, jóvenes y adultos; apoyan a movimientos espirituales; visitan a ancianos y a presos en las cárceles. Acuden a los pueblos y organizan las Misas, la Confirmación y la Primera Comunión. También visitan residencias estudiantiles y lugares en los que se concentran los desfavorecidos como las estaciones de tren y los mercados. Son, para los pobres y los abandonados, como ángeles, hermanas, madres: son el brazo de la misericordia.

En su casa encontraban tranquilidad y reposo, pero el 19 de septiembre de 2017, a las 13:00 horas, la tierra tembló en Cuernavaca y muchos muros se derrumbaron. También su casa tembló y sus muros se cubrieron de grietas: en lugar de protección, ya solo representaban un peligro. Hubo que demoler parte del complejo, entre otros, la casa de retiro, y por esta razón, muchas actividades ya no son posibles: días de retiro, impartición del Catecismo, asesoramiento y cuidado de niños. Las Hermanas enfermas y ancianas tuvieron que ser trasladadas a otras casas. Desde ese 19 de septiembre, gran parte de la energía de las religiosas va a parar a la rehabilitación y a la obtención de fondos por lo que el motor de la evangelización en Cuernavaca está atascado.

“Urge que Cristo reine”: este es el lema de la congregación que está activa en muchos países, incluso en algunos tan difíciles como Indonesia y Sierra Leona. Es el amor el que urge, pues muchas almas esperan la llegada de las religiosas. Pero estas necesitan nuevos muros que ofrezcan protección y les infundan energía en el silencio y el recogimiento para su polifacética labor evangelizadora. Los planes para la renovación están listos y las obras han empezado. ACN contribuyó con 1 millón 142 mil pesos para levantar los nuevos muros de la casa de las Clarisas de Cuernavaca.

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