ACN.- La provincia de Cabo Delgado, en el norte de Mozambique, atraviesa desde hace años una situación de mucho sufrimiento: una ola de violencia terrorista ha causado un clima de guerra y desplazado a más de 700.000 personas. Desgraciadamente, las noticias de aldeas incendiadas y decapitaciones se han convertido en algo habitual en la región.
En esta situación, seguir con vida supone un desafío, y evangelizar se convierte en un reto aún mayor. Desde el inicio de esta ola de violencia en 2017, la fundación Aid to the Church in Need ha intensificado su apoyo a la Iglesia del norte de Mozambique. Recientemente, la Diócesis de Pemba ha puesto en marcha un proyecto de evangelización gracias al apoyo de ACN: “Evangelización en tiempos de crisis”. Se trata de una iniciativa dirigida a continuar con la misión de la Iglesia a través del medio de comunicación que mejor funciona en este momento en la región: la radio.
Ya antes de la crisis el acceso a las aldeas remotas era difícil debido a la falta de recursos y al mal estado de las carreteras, que se vuelven intransitables en tiempos de lluvia, pero con el conflicto armado y la pandemia del coronavirus todo se ha vuelto aún más peligroso. En esta situación, la radio ofrece la posibilidad de seguir haciendo llegar a una población aislada por la guerra, la pandemia, la falta de recursos y las distancias la catequesis, la formación espiritual, hacerles partícipes de la celebración de la santa misa e incluso consolar el alma con música cristiana.
Una de las emisoras católicas de la región –Rádio São Francisco– fue completamente destruida por los terroristas, por lo que otra emisora católica –Rádio Sem Fronteiras-, se ha vuelto crucial y ha aumentado su área de audiencia. La ayuda de ACN le ha permitido crear nuevos programas e incluso conseguir tiempo de emisión en otras radios para ampliar su alcance. Sin embargo, ACN no solo ha apoyado la transmisión, sino también la recepción de la señal.
Además, la situación en el norte de Mozambique es tan grave que muchas comunidades ni siquiera tienen un aparato de radio o carecen incluso de electricidad. Por ello, ACN ha financiado la adquisición de aparatos de radio para varias comunidades, concretamente, de dispositivos que pueden recargarse con energía solar. Cada aparato de radio ha sido entregado a un líder de la comunidad para que el mayor número posible de cristianos puedan escuchar la que quizás sea la única -y más poderosa- fuente de esperanza en estos tiempos de guerra y pandemia: el Evangelio.
El Padre Latifo Fonseca, director de Rádio Sem Fronteiras, ha expresado su gratitud a los benefactores de ACN: “Recibid mi bendición especial para cada uno de vosotros, pues cada día sois facilitadores de la misión de Jesús en lugares donde se sufre mucho”.
Así, donde surgió una ola de violencia ahora cobran fuerza las ondas radiofónicas que siembran paz y esperanza en tiempos de guerra y pandemia. A los que ya no albergaban esperanzas les llega ahora el mensaje del que “hace nuevas todas las cosas” (Apocalipsis 21,5).