Los Espiritanos, o Misioneros del Espíritu Santo, trabajan en Zambia desde 1971. La congregación envía a sus sacerdotes allí donde el trabajo pastoral es particularmente difícil, especialmente en regiones remotas y subdesarrolladas.
En la Diócesis de Ndola, se estableció recientemente una nueva parroquia en la aldea de Baluba, bajo la tutela de los Padres Espiritanos. El número de fieles crece rápidamente en esta región predominantemente rural, y muchos de sus habitantes participan activamente en la Iglesia. Sin embargo, su modesta iglesia, ya demasiado pequeña y en mal estado, ha sufrido aún más daños a causa de los fuertes vientos y la lluvia.
El padre Damian Lutanda Simungala, párroco, nos ha pedido ayuda. «Las lluvias son intensas aquí, y la semana pasada, el techo de nuestra iglesia fue arrancado por fuertes vientos. Ahora nos preocupa mucho que, con las goteras y su ya mal estado, las fuertes lluvias puedan provocar su derrumbe. Vivimos en una zona rural remota, y aunque nos hemos esforzado por reforzar la vieja iglesia, solo Dios sabe cuánto tiempo más resistirá. Por eso, recurrimos a ustedes para solicitarles urgentemente su apoyo y así evitar una verdadera catástrofe».
Por ahora, la Santa Misa se celebra al aire libre, lo cual es difícil, sobre todo para las madres con niños pequeños y para los ancianos. Además, como escribe el padre Damián: «Necesitamos urgentemente una iglesia donde podamos crear un ambiente de oración y reservar el Santísimo Sacramento adecuadamente para la adoración y la bendición».
Es una gran tristeza para los fieles católicos de Baluba ver su iglesia dañada y deteriorada, y no poder celebrar la Santa Misa en un lugar adecuado. Les hemos prometido de inmediato $23,500 para que la iglesia existente pueda ser reparada y también para ampliarla y mejorarla. ¿Considerarían ayudarnos con una contribución para que los habitantes de Baluba puedan celebrar de nuevo con alegría y alabar a Dios en un entorno digno, sin estar expuestos a las inclemencias del tiempo?
Tu donativo puede devolverles un hogar de fe. Con tu ayuda, los fieles de Baluba podrán volver a celebrar la Eucaristía en una iglesia segura y digna. Dona hoy y haz posible que esta comunidad alabe a Dios con alegría y esperanza.
