ACN.- Decenas de miles de jóvenes y niños de países en crisis como Siria, Egipto, Armenia, Ucraina o Líbano participan estén verano en campamentos y cursos de verano apoyados por ACN.
Más de la mitad de los cursos tendrán lugar en Siria. Después de una guerra que dura más de diez años y que ha derivado en una situación económica dramática, la fundación apoyará a 45.574 participantes, en su gran mayoría niños y jóvenes, que entre junio y septiembre visitarán 273 campamentos de verano para retomar fuerzas y sanar heridas. Los participantes son cristianos de diferentes confesiones pertenecientes a las diócesis de Homs, Alepo, Lataquia, Tartús, Jazira, Hama y Damasco, entre otras. Las iglesias locales intentan con estos proyectos no solo reconstruir las estructuras sino también las almas y el espíritu de las personas, sobre todos de los niños y los jóvenes que a menudo son los que más han sufrido las secuelas de la violencia y la guerra.
Este año, ACN ha liberado fondos adicionales para campamentos de verano en regiones donde los niños se vieron afectados por el reciente terremoto, como Latakia, Hama y Alepo.
Los campamentos de verano suelen tener lugar en el marco de grupos de scouts; otros como grupos de oración y de catequesis y clubes juveniles cristianos reciben apoyo para distintas actividades.
El segundo país con mayor participantes y número de cursos será Líbano, donde ACN ha intensificado enormemente la ayuda en los últimos tres años, desde la explosión de agosto de 2020. Tendrán lugar 106 campos de verano en todo el país financiados por la fundación, en los cuales se calcula la participación de 18.855 niños y jóvenes libaneses.
“Durante la última reunión de ROACO, comité que reúne las obras de ayuda a las Iglesias Orientales, el santo padre nos agradeció el apoyo a los jóvenes de las iglesias orientales. Nos animó a escuchar los deseos que llevan en sus corazones. Los jóvenes quieren ser en estos países protagonistas del bien común, la ‘brújula’ de la acción social”, explica Marco Mencaglia, director de proyectos para Aid to the Church in Need International.
“El Papa pidió a los jóvenes que sean centinelas de paz para todos, profetas que sueñen y anuncien un mundo diferente, un mundo que ya no esté dividido. Nuestra fundación ACN está incrementando masivamente su compromiso con los jóvenes de estos países. Queremos ser parte de este programa de futuro”, afirma Mencaglia.
Algunos de los programas de apoyo para los cursos y campamentos de verano tienen una larga tradición en el elenco de ayudas de ACN, como es el caso de los campamentos para los cristianos de Tierra Santa de Jordania, Palestina e Israel.
También en Egipto, ACN apoyará cuatro iniciativas en 2023: tres organizados por el patriarcado católico copto – entre ellos uno para huérfanos, jóvenes con necesidades y cuidados especiales, así como sus padres – y uno dirigido a niños y jóvenes egipcios y sudaneses implementadas por el Centro de Jóvenes y Refugiados, bajo la dirección de los salesianos.
Sin embargo, estos cursos de formación de verano son fundamentales para muchos niños y jóvenes no solo en Oriente Próximo. También en Kazajstán, Ucrania, Cuba, Lituania o Armenia se organizarán cursos y campamentos apoyados por ACN.
Debido a la triste realidad que está sufriendo el este de Europa, debido a la invasión rusa en Ucrania, también los jóvenes de este país recibirán especial atención. En Ucrania, ACN apoyará cinco proyectos bajo el título “Vacaciones con Dios”, y como en Hungría y Estonia campos de verano para niños y jóvenes ucranianos.
ACN apoyará con 66 proyectos, más de 400 cursos y campamentos de verano que se llevan a cabo entre junio y septiembre en 13 países.