ACN.- “El principal reto para estos próximos meses, para la ciudad de Matamoros es ver cuántos recursos y espacios son necesarios para atender a las comunidades que sean deportadas en masa” dijo Eugenio Andrés Lira Rugarcía, obispo de Matamoros, ante el aumento de los migrantes en la frontera.
La nota enviada a la Agencia Fides señala que la diócesis de Matamoros está trabajando intensamente con dos casas para migrantes y un centro de información.
El obispo ha subrayado que el desafío principal para los próximos meses es el de verificar los recursos y espacios que deben servir para acoger a la comunidad de los expulsados che podría llegar a esta ciudad de frontera. “Se requieren múltiples esfuerzos, trabajar en conjunto por parte de las autoridades, sociedad civil, las organizaciones religiosas y otros organismos que quieran ayudar, buscando el bien de los migrantes y de sus familias”, concluye la nota.